Dr Victor Fernando Villa Esteves
Geriatra
La hepatitis C es una enfermedad inflamatoria
del hígado provocada por el virus de la hepatitis C. A diferencia de la A y la
B en este tipo de padecimiento se tiende a la cronicidad y a permanecer con
pocos síntomas, lo que hace que su diagnostico muchas veces se realice hasta
varios años después de adquirida, es decir, cuando el daño al hígado es ya importante.
Esta enfermedad, usualmente se adquiere a
través del contacto con productos de la sangre humana; como por ejemplo un
pinchazo con una aguja usada, también en los casos en que se recibió
transfusión Sanguínea antes de 1992 o incluso hoy se podria adquirir si no
existe un debido control y pruebas de la misma antes de transfundirnos, por
otra parte existe un riesgo elevado cuando se usan drogas intravenosas
compartiendo la misma aguja.
El virus una vez que ingresa en el organismo
por cualquiera de estos mecanismos, se aloja en el hígado ocasionando una
inflamación que muchas veces solo se detecta a través de pruebas de laboratorio
( perfil hepático, PCR y detección de hepatitis C).
Conviene saber que además de lo anterior pero
con menos frecuencia se puede contraer el virus a través de las relaciones
sexuales o la convivencia intima con un enfermo con quien se comparten
rastrillos, cepillos de dientes o artículos de uso personal. El personal de
salud medicos y enfermeras o trabajadores de asilos son población vulnerable.
Finalmente se ha demostrado también la transmisión de una madre al feto, esto
sucede cuando la mujer presenta ya la enfermedad activa, lo mismo en personas con falla renal que se
hacen diálisis frecuentes y aquellas que se tatúan el cuerpo con agujas
contaminadas.
SINTOMA:
decíamos que en general no se tienen síntomas y que lo grave de esta enfermedad
es que ocasiona una inflamación constante que puede conducir a la cirrosis o
incluso en algunos casos se le relaciona con mayor predisposición al cáncer del
hígado. Sin embargo, algunos síntomas generales que se pueden tener son; dolor
abdominal en la parte superior derecha del abdomen, fatiga, anorexia orina
oscura, comezón, nauseas, vomitos y
coloracion amarillenta de la piel.
TRATAMIENTO;
No existe cura para la hepatitis C pero algunos medicamentos
controlan el avance de la enfermedad y por tanto sus complicaciones; el
interferon y algunos antivirales (ribavirina) disminuyen las concentraciones
del virus y mejoran el pronostico al igual que los inhibidores de proteasas.
Cuando los síntomas son agudos y severos se
recomienda el reposo, evitar el alcohol, aplicarse la vacuna contra la
hepatitis A y B ya que se tiene mayor tendencia a adquirir cualquier otra
enfermedad en el hígado.
No se deben tomar vitaminas, suplementos
alimenticios o medicamentos como el paracetamol a menos que sean indicados por
un medico que conoce de nuestro padecimiento quien ajustara las dosis o nos
brindara alternativas.
Como parte del manejo se sugiere una dieta
saludable proporcionada por un nutriologo, ademas de una rutina de ejercicio
regular.
Cuando se padece hepatitis por muchos años, el
hígado puede dar síntomas importantes que ameriten que seamos sometidos a una
cirugía de trasplante hepático la cual podría ser de donadores vivos o muertos,
con ella se han obtenido éxitos de hasta un 90%.
En un futuro la medicina genomita y el uso de
celulas madre podrán ser una alternativa mas al alcance de todos nosotros.
En tanto tenemos estos avances médicos, la
mejor manera de proteger nuestro hígado de esta enfermedad es con medidas
preventivas; usando guantes, agujas y jeringas esterilizadas en la
administración de inyecciones,
acupuntura, tatuajes o al manejar cualquier recipiente con sangre; debemos
utilizar protección con condón en las relaciones sexuales, evitar el contacto
con secreciones de un enfermo, realizarnos pruebas para la detección de
hepatitis C sobre todo si tenemos síntomas o convivimos con alguien que la
tenga y evitar donar algún órgano si es que somos portadores. Los incrementos
de casos en este padecimiento nos obligan a darle mas importancia y atención al
mismo ya que se trata de una enfermedad que puede poner en peligro nuestra
vida.