martes, 19 de abril de 2016

La Hepatitis C en los adultos


Dr Victor Fernando Villa Esteves
Geriatra


La hepatitis C es una enfermedad inflamatoria del hígado provocada por el virus de la hepatitis C. A diferencia de la A y la B en este tipo de padecimiento se tiende a la cronicidad y a permanecer con pocos síntomas, lo que hace que su diagnostico muchas veces se realice hasta varios años después de adquirida, es decir, cuando el daño al hígado  es ya importante.
Esta enfermedad, usualmente se adquiere a través del contacto con productos de la sangre humana; como por ejemplo un pinchazo con una aguja usada, también en los casos en que se recibió transfusión Sanguínea antes de 1992 o incluso hoy se podria adquirir si no existe un debido control y pruebas de la misma antes de transfundirnos, por otra parte existe un riesgo elevado cuando se usan drogas intravenosas compartiendo la misma aguja.
El virus una vez que ingresa en el organismo por cualquiera de estos mecanismos, se aloja en el hígado ocasionando una inflamación que muchas veces solo se detecta a través de pruebas de laboratorio ( perfil hepático, PCR y detección de hepatitis C).
Conviene saber que además de lo anterior pero con menos frecuencia se puede contraer el virus a través de las relaciones sexuales o la convivencia intima con un enfermo con quien se comparten rastrillos, cepillos de dientes o artículos de uso personal. El personal de salud medicos y enfermeras o trabajadores de asilos son población vulnerable. Finalmente se ha demostrado también la transmisión de una madre al feto, esto sucede cuando la mujer presenta ya la enfermedad activa,  lo mismo en personas con falla renal que se hacen diálisis frecuentes y aquellas que se tatúan el cuerpo con agujas contaminadas.
SINTOMA: decíamos que en general no se tienen síntomas y que lo grave de esta enfermedad es que ocasiona una inflamación constante que puede conducir a la cirrosis o incluso en algunos casos se le relaciona con mayor predisposición al cáncer del hígado. Sin embargo, algunos síntomas generales que se pueden tener son; dolor abdominal en la parte superior derecha del abdomen, fatiga, anorexia orina oscura, comezón,  nauseas, vomitos y coloracion amarillenta de la piel.
TRATAMIENTO; No existe cura para la hepatitis C pero algunos medicamentos controlan el avance de la enfermedad y por tanto sus complicaciones; el interferon y algunos antivirales (ribavirina) disminuyen las concentraciones del virus y mejoran el pronostico al igual que los inhibidores de proteasas.

Cuando los síntomas son agudos y severos se recomienda el reposo, evitar el alcohol, aplicarse la vacuna contra la hepatitis A y B ya que se tiene mayor tendencia a adquirir cualquier otra enfermedad en el hígado.
No se deben tomar vitaminas, suplementos alimenticios o medicamentos como el paracetamol a menos que sean indicados por un medico que conoce de nuestro padecimiento quien ajustara las dosis o nos brindara alternativas.
Como parte del manejo se sugiere una dieta saludable proporcionada por un nutriologo, ademas de una rutina de ejercicio regular.
Cuando se padece hepatitis por muchos años, el hígado puede dar síntomas importantes que ameriten que seamos sometidos a una cirugía de trasplante hepático la cual podría ser de donadores vivos o muertos, con ella se han obtenido éxitos de hasta un 90%.
En un futuro la medicina genomita y el uso de celulas madre podrán ser una alternativa mas al alcance de todos nosotros.
En tanto tenemos estos avances médicos, la mejor manera de proteger nuestro hígado de esta enfermedad es con medidas preventivas; usando guantes, agujas y jeringas esterilizadas en la administración de  inyecciones, acupuntura, tatuajes o al manejar cualquier recipiente con sangre; debemos utilizar protección con condón en las relaciones sexuales, evitar el contacto con secreciones de un enfermo, realizarnos pruebas para la detección de hepatitis C sobre todo si tenemos síntomas o convivimos con alguien que la tenga y evitar donar algún órgano si es que somos portadores. Los incrementos de casos en este padecimiento nos obligan a darle mas importancia y atención al mismo ya que se trata de una enfermedad que puede poner en peligro nuestra vida.




martes, 5 de abril de 2016

El monstruo de la Irracionalidad

Dr. Victor Fernando Villa Esteves
Geriatra
Presidente Fundación Alzheimer Guadalajara
www.fernandovillaesteves.blogspot.com

Además de la pérdida de memoria, existen síntomas que ocasionan graves conflictos en las familias y en los cuidadores de enfermos con Alzheimer, uno de ellos es la “Irracionalidad” definiendo a este síntoma como la perdida que sufre el enfermo de su capacidad para “Razonar”  (ordenar ideas y conceptos para llegar a una conclusión RAE).  Una persona razonable entiende su enfermedad, como debe ser su tratamiento y las consecuencias de no hacer caso a las indicaciones médicas, también la manera adecuada de comportarse en familia y sociedad. El razonamiento trabaja en conjunto con el “Juicio” (Facultad del entendimiento que nos permite discernir y valorar). Ambos síntomas de falta de Razonamiento y juicio se presentan en etapas leves y moderadas de las demencias ocasionando caos inimaginable, en el seno de muchas familias.
En el Alzheimer y otras demencias. El enfermo se comportara en la medida de la etapa que cursa su enfermedad y requerirá forzosamente de los cuidados de un cuidador principal profesional, que le permita desenvolverse en un ambiente seguro para él; por otra parte la situación económica de muchas familias obliga que para poder costear estos cuidados con personal calificado y que rondan en 1,000 dólares mensuales (aproximadamente). La familia tenga que salir a trabajar.
Por tanto un problema muy común al que me enfrento día con día, es en el que la hija, que habitualmente es la cuidadora principal o algún otro familiar; llegan a un desgaste natural por la enfermedad y piden ayuda externa urgente, para poder sobrellevar el agotamiento del cuidador primario o para salir a trabajar.
Sin embargo, este grito desesperado de ayuda se puede topar con un grave obstáculo y que es, que el enfermo con demencia, no acepta y rechaza rotundamente la ayuda de otras personas desconocidas para ellas o la presencia de una enfermera o cuidadora profesional en su casa.

 Este fenómeno sucede, justamente por la falta de Razonamiento y Juicio adecuado del enfermo con demencia; Para ellos no existe justificante alguno para que alguien más los cuide, pues ellos afirman estar en perfecto estado de salud y un extraño solo les quita privacidad. La conducta irracional también se dará muchas veces; al rechazar medicamentos, el baño diario, las visitas con el geriatra, la toma de exámenes de laboratorio, la higiene dental, el dejar de manejar su carro, el no poder usar su dinero libremente y en muchas otras actividades de la vida diaria que anteriormente ellos desempeñaban sin ningún contratiempo.

Pero la negativa rotunda para que un cuidador especializado los atienda, es un grave problema ya que muchas hijas mal orientadas acaban cediendo a los deseos de sus padres y los dejan solos en sus casas, los encierran o los envían a una institución.
 Acorde a la escala del Dr. Barry Reisberg en la retrogenesis (FAST); permitir que un enfermo con alzheimer moderado este solo en casa, es como permitir que un niño de 5-6 años se quede libre en el hogar, es decir, sucederán graves accidentes tarde o temprano.

RECOMENDACIONES:
1.- Pierda el miedo al enfado de su familiar y dese cuenta que el roll de cuidarlo es ahora suyo.
2.-Usted debe priorizar el bienestar del enfermo ante todo; anticipe y de antemano prevenga a los cuidadores, a la posibilidad de que no los acepte, los rechace o pueda agredirlos verbalmente.
3.-Conviene introducir al cuidador sin uniformes ni batas sino con ropa informal y casual, llame al cuidador por su nombre, aproveche la pérdida de memoria para fingir que se trata de algún pariente lejano, que le cuidara.
4.-Incorpore al cuidador de manera gradual y que los cuidados sean de una supervisión a distancia, lo peor que puede hacer un cuidador es intentar hacer, todas las cosas por ellos, al inicio.
5.- Una de las cosas que pueden causar crisis de comportamiento en un enfermo con demencia Alzheimer, es que lo hagan sentir como niño o desvalido; trátelo siempre con dignidad y respeto, brinde cuidados personalizados.
6.-Evite tener cosas de valor dentro de su hábitat.
7.- Tenga esperanza que esta conducta y este rechazo a extraños, acabara con el tiempo; claro que mucho dependerá de la empatía y el trato que el cuidador le confiera. No intente hacerlo razonar.
 Aceptación; la demencia daña la memoria pero también el razonamiento y el juicio, entre más tarde usted en darse cuenta de que, es la misma enfermedad la causante de todos estos cambios en su ser querido, mas tardara en solucionar sus problemas. No se puede razonar con alguien irracional, como tampoco se puede hacer que recuerde y tenga buena memoria.

Lo que nos queda es aceptar esta situación como familia y brindarle al enfermo la mejor calidad de vida que podamos.